Descripción | Descripción proveniente de YouTube: Discurso de Cándido en la Plaza Mayor de Ourense, Galicia (España), a 19/5/2011
DEMOCRACIA REAL Y DIGNA
Hola: Soy Antonio. Bueno, quiero que vaya por delante que no tomo aquí la palabra para buscar ninguna clase de protagonismo. Vosotros sois los protagonistas y me llena de sentimiento y de emoción que hayáis sido capaces de plantar cara, con todas las consecuencias, ante esta situación que vive el país y que tanto está repercutiendo en vuestra generación.
Quiero daros ánimo para que prosigáis en este movimiento de reflexión colectiva y que va a lograr que muchas cosas se replanteen. Toda España está pendiente de vosotros y los políticos están muy preocupados de los acontecimientos de este mayo, que como aquel otro, puede traer nuevos aires a la democracia. Por mi edad me separan algunas cosas y conceptos de vosotros, pero estoy de acuerdo en lo fundamental, en esa voz, que lejos de cualquier interferencia habéis alzado en defensa de una democracia real y no de la que nos están vendiendo con su nombre.
Democracia no es amontonar ni manipular gente como mercadería a la que venderle prendas. Democracia es un hombre y una mujer, un niño y un anciano que puedan vivir dignamente. Y cuando esto no ocurre surge la indignación, los "indignados", como algunos nos quieren llamar, pero que tiene otros significados más profundos.
En mi calidad de hombre maduro en años, he visto a lo largo de mi vida pasar muchos gobiernos y, por eso, puedo con cierta experiencia deciros lo que ha pasado esta mañana por mi cabeza mientras escribía estas palabras. Vuestros padres y abuelos, mucha gente como yo hemos votado un día por la democracia, una vez que se puso término a aquella dictadura de tantos años. Y nadie que sea sensato debe tener la tentación de atentar contra un sistema que tantos esfuerzos y lágrimas costó a muchos y tantas cosas también buenas nos trajo. Pero sí hay que luchar de nuevo cuando la democracia se ha pervertido y se ha instalado en las distintas instituciones. Y no sólo en la clase política de este país sino en casi todos los estamentos europeos. En este nuevo estado de cosas la gran caja de resonancia política es el parlamento y no las consignas de partidos, sólo ávidos de poder y de influencia. De las sesiones parlamentarias como de cualquier otro acto de alcance político sólo es el parlamento el que dignifica la democracia.
España lo que necesita es una política transparente y eficaz, una política de puertas afuera. Esta España multinacional que todos esperábamos unificadora no ha servido más que para dividirla. Los putos votos jugados como mercancía electoral, el puto amo que siempre es el poder mal dirigido. El pueblo dice que algo hay que hacer y los políticos no saben que hacer...
Hoy por desgracia tenemos frente a nosotros cientos de muros y de ideologías que pretenden separar y dividir manteniendo conflictos y problemas de toda índole. La venta de muchas democracias a los poderes financieros, a las multinacionales, a la banca y a los grandes monopolios que pagan las campañas políticas y convierten a los gobiernos en títeres. Son esos mercaderes de palomas y de liebres, de ideologías basura y que bendicen la destrucción de las economías modestas; los vendedores de armas o los dementes que buscan un idilio extraterrestre donde no hay nada, quemando miles de millones de dólares mientras dejan de morir de hambre a millones de seres humanos. Gobiernos que han perdido su acción eficaz, llenos de burócratas y que se pavonean grandes e importantes. Partidos de oposición cargados de imputados y de casos también de corrupción. Gentes que se adaptan a su tiempo y a su momento con plena irresponsabilidad. No hombres de Estado.
Toda esta crosis es la expresión del egoísmo total. Buscar beneficios más allá de lo posible. Un virus contagioso que nos ha llevado a todo esto. Ese objetivo de globalizarlo todo no es más que el nuevo totalitarismo.
Pero con todo esto, hemos de dejar claro que a pesar de la dura crítica que puedan recibir los irresponsables nunca este movimiento que ha nacido no es sino la expresión de un deseo amplio y profundo de regeneración democrática en todas las instituciones. Y un aviso para navegantes: no dejéis que nadie, absolutamente nadie, pueda utilizar este movimiento para escalada de intereses políticos.
Sólo esta idea responsable y de alto ideario nos dará los frutos. De otro modo este colosal esfuerzo quedará en nada. No será el morir lo que más nos duela, sino el vivir tan indignamente. Cándido. |